-¿Te vas del país? Preguntó
tratan de calmar su respiración, me quedé callado sin saber cómo
responderle-¡¿Te vas?!- Preguntó fuerte-¡Respóndeme!
-Sí...- Respondí bajo pero
de igual manera me escuchó, no supe leer su expresión pero noté el temblor de
su labio inferior haciéndose cada vez más fuerte.
-¿Y no pensabas decírmelo?
Te ibas como un cobarde sin darme la cara ¿Cierto?- se iba desesperando a
medida que pronunciaba las palabras, cada una más amarga que la otra,
mostrándome así su molestia que todavía no alcanzaba a comprender bien.
-Pensaba que no querías
verme...- Comencé a decir, y era verdad por eso no le había ido a ver. Si iba
sería como pasarme por encima sus palabras e ir a molestarlo de igual manera,
tenía que respetar su decisión así me doliera mucho.
-No te quiero ver- expulsó
fríamente- Pero no te puedes ir- Trataba de poner una mirada helada pero esta
vez su cuerpo lo traicionaba. Sus manos comenzaban a sudar y su cuerpo estaba
temblando- ¡¿Por qué intentas escaparte?!
-Es lo mejor, tu ya no me
quieres en tu vida, yéndome de aquí ya no me verás más ¿no es eso buena
noticia? No entiendo porque estás reaccionando así- Dije, lo más suavemente
posible, realmente quería saber el porqué de su reacción, yo había pensado que
con esta decisión el más feliz sería él.
-¡Es la mejor noticia que he
recibido! -Me dolió escucharlo pero en el momento en que lo dijo su cuerpo se
tambaleó peligrosamente, me acerqué a ayudarlo a equilibrarse pero me apartó la
mano de inmediato- ¡No me toques! Es-estoy bien...- Pero su voz no sonaba para
nada de bien, sonaba como si estuviera borracho, lo miré preocupado mientras él
se ponía las manos en la cabeza como para aliviarse el dolor.
-Jaejoong ¿Qué sucede?- El
cerró los ojos calmándose- ¿Te viniste corriendo?- el asintió pesadamente- Ven,
tienes que quitarte esa ropa mojada. Te enfermarás- Le advertí, pero el frunció
el ceño.
-¡Qué estoy bien! Es solo un
mareó que ya se me pasará...- Pero como
si el destino estuviera en su contra atacando sus palabras, vi como se
desplomaba en el suelo. Corrí a levantarlo mientras le golpeaba despacito la cara para que reaccionara.
-¡Jaejoong! ¡Jaejoong! ¿Me
oyes? Maldita sea...- Lo levanté en mis brazos llevándolo a mi dormitorio, lo
recosté cuidadosamente mientras le sacaba todo la ropa mojada, estaba todo empapado, estoy seguro que no
había ni siquiera intentado ocultarse de la lluvia, también se había venido
corriendo. Fui a buscar una toalla del baño y comencé a secarle el cuerpo
mientras el tiritaba recostado con los ojos cerrados. Le toqué la frente,
estaba ardiendo, seguro estaba con mucha fiebre, me paré para ir a buscar un
paño mojado para pasárselo por la frente e ir por unas pastillas, pero
su mano me agarró repentinamente de la muñeca, me voltee sorprendido.
-Yunho...Yunho...- Susurró
bajito aún con los ojos cerrados.
-Aquí estoy- dije
acercándome, dejando su mano entre las mías, apretándolas para que se diera
cuenta de que estaba a su lado- ¿Estás bien?- le pregunté pero el frunció el
entrecejo.
-Yunho....No te
vayas...Yunho...- Seguía diciendo, creí que la fiebre quizás le hacía delirar
un poco.
-Sólo iré a buscar una
pastilla, espérame un poco ¿De acuerdo?- dije acariciándole la cabeza,
acomodándole los mechones de pelo rebelde, me paré pero el nuevamente me tomó
de la mano impidiéndome que diera un paso.
-No Yunho, No te vayas
mañana... No te vayas del país, n-no me dejes solo de nuevo...- Dijo mientras
sollozaba bajito, yo me quedé mudo ¿Eso era efecto de la fiebre? Le di suaves
caricias en el pelo mientras me acercaba a su oído para que me escuchara bien.
-No me iré, no te dejaré
solo- Le dije mientras lo seguía acariciando tratando de calmarlo.
-¿Me lo prometes?- Preguntó
tímidamente con la boca entreabierta, se notaba lo cansado que estaba
-Lo prometo, nunca te dejaré
solo.- Prometí sinceramente, lo que más quería en este mundo era estar al lado
de Jaejoong y si él me lo permitía yo estaría siempre ahí para él. Quizás era
la fiebre que provocaba que él dijera esas palabras pero yo ya había hecho mi
promesa y no la rompería aunque él no se acordara mañana de lo que recién había
dicho- Ahora iré a buscar los remedios, vengo enseguida- Él asintió tranquilo.
Fui a ver en mi botiquín y
saqué dos pastillas que le calmarían la fiebre por ahora y también con una
toalla y un lavatorio con agua entré nuevamente en mi dormitorio, me arrodillé
al lado de la cama.
-Aquí tengo las pastillas,
necesito que abras la boca ¿Sí?- Al escucharme abrió la boca obedientemente,
mientras yo alzaba un brazo por abajo de su cabeza para levantarlo un poco y
darle un poco de agua para que tragara la pastilla- ¿Ya la tragaste?- Pregunté
y el asintió, era como un niño pequeño.- bien ahora te pasaré un paño por la
cabeza para bajar la fiebre- le avisé, recostándolo cuidadosamente de nuevo.
Remoje el paño y lo puse en
su cabeza hasta que este se calentó por la temperatura de Jaejoong y tuve que
meterlo de nuevo al agua repitiendo la acción cada vez que se volvía a
calentar.
-Yun...ho..- Susurró soñoliento,
a punto de quedarse dormido
-¿Mm?
-Gracias por cuidarme- Sentí
unas ganas enormes de abrazarlo, él me daba las gracias, siendo que esto era lo
mínimo que podía hacer por él después de tanto daño que le había hecho, los
efectos de la fiebre habían puesto vulnerable a Jaejoong, quizás hasta el punto
de que se le olvidara cuanto lo había hecho sufrir.
-No merezco recibir tus agradecimientos...-
Le Contesté, pero el ya no me respondió, se había quedado dormido. Limpié una
gota de su mejilla, no sabía si era una lágrima o una gota de agua por el
pañuelo. Le toqué la frente nuevamente, comprobando que la fiebre había bajado,
por lo que al notar como tiritaba lo tapé con la sábana para que no se
resfriara. Seguí con la técnica del pañuelo por toda la noche hasta sentir por completo su frente fría.
Estaba saliendo nuevamente
el sol anunciando la mañana del nuevo día, fui a cerrar las cortinas de
inmediato para que Jaejoong no se despertara a causa de los rayos de sol, me
acordé de que había lavado su ropa así que la fui a buscar y la dejé a los pies
de la cama para cuando se despertara. Ocupé mi tiempo en ir a hacerle un
desayuno, ya que tenía que recuperar las fuerzas perdidas de ayer, lo dejé en
una bandeja lista para ir a dejársela, pero en ese instante escuché como
gritaba mi nombre desesperadamente. Miré hacia la habitación y vi como salía
rápidamente mirando a todos lados.
-¡Yunho, Yunho!- Seguía
gritando.
-Aquí estoy ¿Ocurre algo?-
Nuestras miradas se encontraron y Jaejoong pareció calmarse, dándome por
primera vez una de sus cálidas miradas a las que acostumbraba cuando éramos
pareja.
-¿N-No...Te has ido? ¿No fue
un sueño?- Preguntó medio titubeando
-Te prometí que no me iría
¿cierto?- El asintió, pero en ese instante se tambaleó apoyándose de la pared
para no caerse, yo corrí a su lado afirmándolo entre mis brazos, protegiéndolo-
Recién te estás recuperando, tienes que ser cuidadoso. Vamos, te ayudaré a ir a
la cama- caminamos juntos hasta que él pudo recostarse y calmarse- ¿Te sientes
mejor?- Pregunté, y el asintió.
-¿Tenías el vuelo ya
programado?
-Sí, pero ya no importa- El
miró hacia abajo sin cruzar miradas conmigo dándole vuelta a un pensamiento del
que yo no podía saber cual era- Te traeré el desayuno- dije, saliendo. El
ambiente entre los dos si bien no estaba siendo malo, se sentía algo raro.
Quizás sería que yo estaba poniéndolo incómodo, tendría que dejarlo tranquilo.
Tomé la bandeja y partí
nuevamente a la habitación, al entrar vi a un Jaejoong con una mirada pérdida.
-¿Sucede algo?- Me miró por
un minuto pero termino negando con la cabeza- Toma- dije poniéndole la bandeja
en sus piernas mientras en se inclinaba para estar más cómodo- No es lo
suficientemente bueno como tus desayunos, pero creo que no estará mal después
de todo esto me lo enseñaste a preparar tú- comenté, arrepintiéndome ya que el
ambiente se tensó en el instante. Él me miró directamente a los ojos
sorprendido por mi comentario pero no dijo nada y comenzó a comer.
- Está delicioso- Expresó y
yo me alegré de inmediato.
-¿Sí? Muchas gracias,
entonces te dejaré tranquilo- sugerí sabiendo perfectamente que el se sentiría
más cómodo sin mi presencia atosigándolo al lado.
-No te vayas...quédate, por
favor..- Me dijo y yo me descoloqué. Lo miré con una ceja alzada, realmente no
estaba entendiendo su actitud, a que se debía su suave comportamiento-
Necesitamos hablar…- Yo asentí, quizás me diría que lo que había pasado no
significaba nada, de que no me hiciera ilusiones con él, estaba preparándome
para cualquier cosa. Cerró los ojos como si no pudiese decir las palabras.
-Jaejoong, no te preocupes.
Se como son las cosas, sé que no me quieres y yo lo aceptaré, aunque me cueste
demasiado, ya no te molestaré. Solo...quiero que tú seas feliz de una buena vez
por todas, siempre he estado estropeando tu vida. Ya no quiero seguir
haciéndolo- Reconocí tristemente mientras el abrió ambos ojos de par en par.
-No digas eso, los momentos
más felices de toda mi vida los he pasado contigo- Dijo y yo lo miré totalmente
sorprendido- como también he pasado los momentos más tristes- Continuó y yo le
miré arrepentido- ...Sabes todo el daño que me hiciste, y creo que he dado por
pagada mi "venganza" si así se le puede decir. Pero... No me siento
mejor por actuar de la misma manera en que lo hiciste tú, de hecho. En este
momento me siento mal por haberte hecho pasar por tantas cosas...-Lo miré
confundido ¡Él no tenía que sentirse culpable de nada!
-Todo me lo merezco, no
tienes que sentirte así- Le Respondí rápidamente, el sonrió sinceramente.
-Lo sé ¿Pero qué puedo
hacer? Cada vez que te trataba mal me sentía peor, cada vez que te veía me
daban unas enormes ganas de perdonarte sin cumplir ninguna venganza, a estas
alturas me doy cuenta de que haber elegido ese camino hubiera sido lo mejor,
pero me equivoqué y tomé el camino equivocado. Sólo he provocado causarme más
dolor a mí y a ti.
-No es cierto...- Traté de
decirle pero el subió las cejas sabiendo que aunque se lo dijera era verdad.
-Lo siento...- Susurró y yo
abrí grandemente los ojos ¡No podía permitir que él se estuviera disculpando
conmigo!
-¡No me digas eso Jaejoong!
¡Yo soy el que debería disculparse eternamente contigo! Tú no eres el que debe decir lo siento aquí.- Él me agarró
ambas manos.
-¿Recuerdas lo que te dije
ayer cuando estaba con fiebre?- Preguntó y yo asentí, jamás podría olvidar sus
palabras tan sinceras que había creído que habían sido causadas por la fiebre,
pero al escuchar cómo me preguntaba por eso, me alegre al saber que las había
dicho consciente y que no se le habían olvidado- Pues son palabras verdaderas.
En este momento no quiero que te alejes de mí. Pero es tan difícil para mí
hacer como si nada ha pasado, realmente me pongo en el caso y lo intento pero
termino rindiéndome, no puedo fingir.- Dijo con una cara de preocupación.
-¿Me quieres aunque sea un
poquito?- Pregunté esperanzado atreviéndome a acariciarle la mejilla, él no
apartó mi mano.
-¿Acaso en algún momento
podría haberte dejado de querer?- Al escuchar aquellas palabras decir que me
sentí 'Contento' sería poco, sentí un alivio interno inmenso, me sentí en el
verdadero cielo- Te llegué a odiar, si, mucho. Pero siempre mi amor por ti a
estado ahí tapado por el orgullo que me impedía reconocerlo hasta este momento.
-¿Qué te hizo reconocerlo
entonces?- Pregunté muy curioso, tenía en cuenta el repentino cambio de actitud
de Jaejoong pero todavía no podía entender a que se debía específicamente.
-Hace tres días, cuando
había terminado definitivamente cualquier contacto entre nosotros. Comencé de
nuevo a sentirme de esa misma manera en cuando nos separamos hace un año, sin
ganas de hacer nada. Sentía que algo faltaba, los dos días siguientes fueron
igualmente de horribles, no sabía que me estaba sucediendo, cuando estabas
conmigo por ese trato, te odiaba, pero no me sentía de esa manera porque te tenía
cerca. A penas nos separamos aquellos dos días fueron como el infierno- Suspiró
sintiéndose aliviado, yo seguía escuchándolo- y... el detonante final fue ayer,
cuando recibí una llamada de Heechul, diciéndome que te ibas a ir del país y
que nunca más volverías- Abrí la boca, maldito Heechul...
-Le dije que no te dijera-
susurré
-Le agradezco que lo
hiciera- Sonrió- Cuando me lo dijo me encontraba en el río en el que solíamos
estar juntos y había comenzado a llover fuertemente así que decidí que no te
dejaría ir, cuando venía corriendo me detenía a veces preguntándome que era lo
que estaba haciendo. Que haría acá cuando te mirara a los ojos y ahí fue cuando
me di cuenta de que la guerra interna del amor contra el odio, la había ganado
el amor...bueno, luego ya conoces la historia.- Terminó, estaba nervioso, me di
cuenta porque no se atrevía a mirarme a los ojos.
-No quiero obligarte a estar
conmigo- Dije, deseaba con todos mis fuerzas que estuviéramos juntos pero no
quería que él se sintiese obligado solo por sentirse mal o algo así.
-¿No me has escuchado? No es
una obligación, quiero estar contigo porque me di cuenta que aun te amo- ¿Será
porque me lo había negado ya tantas veces que ya no podía creerlo? lo miré
parpadeando sin poder hablar- ¿Sucede algo malo?- Preguntó al ver como no
respondía.
-Sé que no te merezco...- El
puso los ojos en blanco frunciendo el ceño. Se arrodillo en la cama, mientras
tiraba de mis hombros hacia abajo para quedar a la misma altura.
-Escúchame claro Jung Yunho,
yo... ¡Te he perdonado! yo... ¡Te amo! yo... ¡Quiero estar contigo! ¿Te ha
quedado claro?- cruzamos mirada y mi boca se curvó en una enorme sonrisa
incapaz de ser borrada por alguien, vi en la cara de Jaejoong formándose una
igual.
-Clarísimo- Dije mientras lo
levantaba en un gran abrazo, el comenzó a quejarse por aplicar tanta fuerza.
-Vengo recién recuperándome,
ten cuidado- dijo molesto.
-Lo siento, lo siento- me
disculpé sonriente.
-Estoy bien- Susurró golpeándome
fuertemente el hombro. Me quejé y el sonrió- estamos a mano.
-No me puedo quejar. Y...
Ahora que volvimos de esta manera ¿Usarás de nuevo tu anillo?- Pregunté ansioso
pero preocupado por su respuesta, quizás el anillo podría traerle malos
recuerdos y no lo quisiera usar o quizás el día en que se lo dejé afuera de su
departamento lo pudo haber botado.
-Claro que si- Me dijo
suavemente- Lo tengo en el bolsillo de mi pantalón- ¿Pantalón? Hice una mueca
de preocupación. Él comenzó a revisar en los bolsillos del pantalón poniendo
mala cara-Recuerdo haberlo puesto aquí ¿Cuando lavaste la ropa no lo viste?
-Mmm creo, bueno en realidad
debe estar botado por alguna parte del baño- Dije culpablemente. Cuando le iba
a lavar sus ropas, saqué todo del bolsillo lanzándolo al suelo sin preocuparme
que cosas fueran, estaba apurado.
-...Bueno, tienes que
encontrarlo. Ese anillo es muy valioso-Explicó sinceramente- Incluso no me
atrevía a botarlo cuando te odiaba mucho, no lo puedo perder por nada del
mundo.
-No te preocupes, lo
encontraré.- Contesté seguro.
-Gracias- Pronunció
sonriente.
-Todavía no me acostumbro
nuevamente a que me agradezcas, ¿No quieres escuchar mi versión de los hechos?-
Pregunté, lo cierto era que le había explicado de partes lo que había sucedido
hace un año, pero nunca lo habíamos hablado todo detalladamente.
-Ya te he perdonado, no
quiero abrir nuevamente la herida. Te he perdonado por todo, aunque te hayas
equivocado. Ahora solo tratemos de olvidarlo juntos- Dijo y yo sonreí besándole
en los labios.
Después de recibir una nueva
oportunidad de parte de Jaejoong, juraría no volver a desperdiciarla. Nunca me
dejaría llevar por malas emociones, habiendo pasado por aquel infierno que duró
más de un año entero, no quería volver a perderlo nunca, y ahora que sabía y
estaba seguro que él me correspondía a mis sentimientos, no lo soltaría nunca.
Agradecía sinceramente que me haya aceptado y prometía no decepcionarlo porque
mi amor por Jaejoong es eterno y nadie, ni nada podrá romperlo.
y solo estaba ansioso al pensar todo lo que tendríamos que enfrentar juntos, todas las buenas y malas cosas que nos depararía el futuro...
FIN
NOTA: Bueno este fue el capítulo final o.o! Como dije en el principio, no estaba habia estado segura de publicar esta historia, pero a medida que leia sus comentarios, me alegraba mucho! Espero que hayan disfrutado >< y leeré sus comentarios n.n
Sigan leyendo los fanfics que seguiremos publicando^^, gracias :)
Izumi